La Inteligencia Artificial (IA) se ha convertido en una herramienta de cambio, pero no siempre para bien. Aunque muchos ven gran potencial en la IA, pocos consideran cómo esta tecnología facilita el aumento de fraudes, especialmente contra personas mayores.
Imagina recibir una llamada urgente de un familiar, escuchando su voz pidiendo ayuda; sin embargo, puede tratarse de un estafador usando IA. Estos fraudes, que antes eran solo una posibilidad remota, ahora es una amenaza real y en crecimiento.
Los adultos mayores suelen ser un blanco atractivo debido a su falta de familiaridad con las herramientas tecnológicas. Por lo tanto, Conoce cómo la IA se está utilizando para engañar a los más vulnerables y cómo protegerlos de este tipo de estafas.
¿Cómo la Inteligencia Artificial facilita los fraudes?
La IA ha transformado la forma en que los estafadores operan, facilitando fraudes que sean difíciles de detectar. Con los deepfakes y chatbots, los estafadores crean audios y videos realistas que imitan la voz o imagen de personas conocidas.
Esto permite engaños como falsos llamados de emergencia en los que se simula la voz de un familiar pidiendo ayuda inmediata, un tipo de fraude que resulta especialmente efectivo contra personas mayores.
Además, la IA permite personalizar correos electrónicos y mensajes de texto para hacerlos parecer legítimos y específicos para cada víctima. Por ende, los estafadores analizan cómo se comportan sus objetivos, logrando que cada interacción parezca
De este modo, los estafadores pueden operar a gran escala, alcanzando a sus víctimas de manera efectiva. Esto incrementa tanto el número como la sofisticación de los fraudes, afectando a quienes saben poco de estas tecnologías.
Tipos de fraudes que afectan a las personas mayores mediante IA
La Inteligencia Artificial (IA) ha potenciado diferentes tipos de fraudes que afectan de forma desproporcionada a las personas mayores. Entre los más comunes se encuentran:
Falsos llamados de emergencia
Con deepfakes de voz, los estafadores recrean con precisión la voz de un familiar o amigo, y así hacer llamadas de emergencia falsas. En estas llamadas, el estafador simula una situación de urgencia, como un accidente, pidiendo dinero inmediato.
Estafas de soporte técnico
Aquí, los estafadores aprovechan la inseguridad tecnológica de los mayores, enviando mensajes o llamadas que alertan sobre problemas ficticios en sus dispositivos.
Con la ayuda de IA, estos mensajes pueden parecer legítimos y personalizados, indicando pasos urgentes que conducen a la instalación de programas malignos o a pagos por un “soporte técnico” falso.
Estafas de confianza y romance
La IA también permite crear perfiles falsos en redes sociales que simulan personalidades completas, atrayendo la confianza de la víctima.
Las personas mayores, a menudo en búsqueda de conexión, pueden desarrollar vínculos emocionales con estos perfiles, lo cual facilita que eventualmente sean manipulados para enviar dinero o compartir información personal.
Robo de datos personales
Los estafadores emplean la IA para diseñar correos electrónicos y SMS que imitan a instituciones confiables, solicitando información personal. Estos mensajes llevan a las víctimas a compartir datos sensibles como números de cuenta o contraseñas.
Factores de vulnerabilidad en la población mayor
Las personas mayores son un blanco frecuente de fraudes debido a factores de vulnerabilidad que los estafadores conocen. Uno de ellos es la falta de familiaridad con las nuevas tecnologías, lo que les hacer difícil reconocer una estafa digital.
Muchos adultos mayores, acostumbrados a métodos de comunicación tradicionales, no siempre sospechan de mensajes o llamadas aparentemente urgentes, en especial si creen que provienen de familiares.
Además, la soledad y la necesidad de contacto social pueden hacer a los adultos mayores más susceptibles a las estafas de confianza y romance, en las que los estafadores establecen un vínculo emocional falso con la víctima.
Otro factor es el apego a prácticas tradicionales como el uso de cheques y el pago manual de facturas. Los estafadores aprovechan esto para crear una sensación de urgencia, que impulsa a los mayores a actuar sin cuestionar la veracidad de la situación.
Finalmente, los adultos mayores pueden sentir vergüenza o temor a admitir que han sido engañados, lo cual reduce la denuncia y dificulta la detección temprana de estos fraudes, aumentando así su riesgo.
Consejos de prevención y educación para proteger a las personas mayores
Para proteger a las personas mayores de fraudes facilitados por la Inteligencia Artificial, es fundamental enfocarse en la prevención y la educación. Estos consejos pueden ayudar a minimizar el riesgo:
· Establecer una palabra clave familiar: Enseñar a los adultos mayores a confirmar la autenticidad de una llamada urgente con una palabra o frase clave acordada con la familia. Si alguien intenta hacerse pasar por un familiar sin conocer esta clave, es una señal de alerta.
· Educación sobre estafas comunes: Informar a las personas mayores sobre los tipos de fraude más comunes y cómo reconocerlos. Esto incluye recomendarles que ignoren llamadas y mensajes de números desconocidos.
· Automatizar pagos y transacciones: Reducir los pagos manuales ayuda a evitar que se sientan obligados a responder a urgencias de pago. La automatización también disminuye la exposición a manipulaciones fraudulentas.
· Fomentar la denuncia sin vergüenza: Recalcar la importancia de reportar cualquier intento de fraude, incluso si se sienten avergonzados. Esto no solo les protege a ellos, sino que también ayuda a prevenir futuros fraudes a otros.
· Limitar la exposición online: Animar a los adultos mayores a ser cautelosos en redes sociales y a limitar la información personal que comparten, lo que reduce su vulnerabilidad ante estafadores.
La importancia de la denuncia
La estafa puede generar vergüenza o temor, pero compartir la experiencia contribuye a fortalecer la seguridad de toda la comunidad y permite que las autoridades identifiquen patrones y nuevas estrategias de los estafadores.
Para las personas mayores, la denuncia es aún más crucial, ya que facilita el acceso a recursos de apoyo y a la educación preventiva, reduciendo la vulnerabilidad de otros adultos mayores.
Además, al comunicar estos incidentes a bancos, familiares y organizaciones especializadas, se pueden implementar medidas de seguridad más robustas y prevenir que el fraude se repita.
Proteger a nuestros mayores implica no solo educarlos sobre los peligros actuales, sino también fomentar en ellos la valentía para alzar la voz y poner freno a las amenazas que representa la Inteligencia Artificial en manos malintencionadas.